No es novedad que la fortísima sequía de principios de 2018 provocó la pérdida de casi 30 % de la cosecha de soja que se esperaba en el ciclo agrícola 2017/18
Todas fueron malas noticias: se perdieron cerca de 20 millones de toneladas de producción y, frente a esa menor oferta, la industria aceitera exportadora procesó menos porotos en el país. Eso impactó en el ingreso de divisas en concepto de exportaciones de la cadena.
Resume la Bolsa de Comercio de Rosario en un informe que “el valor de las exportaciones cayó un 15 % respecto al año anterior en el período enero-noviembre (casi 2.500 millones de dólares)”. Pero si además se suma lo que el sector gastó en importar poroto de otros orígenes para mantenerse en actividad (las importaciones de soja crecieron 227 %), el balance de divisas quedó negativo en unos 4.000 millones de dólares
El informe de la BCR ahora vislumbra una fuerte recuperación para el ciclo 2018/19, cuando la soja recién está terminándose de sembrar. Partiendo de tres escenarios distintos -según evolucione la disputa comercial entre Estados Unidos y China-, los expertos indicaron que los envíos de soja y sus subproductos podría inyectar hasta 18.000 millones de dólares a la economía.
La producción esperada, en estas hipótesis, volvería a ubicarse en torno a los 50 millones de toneladas. Pero los precios dependerán mucho de la disputa entre Washington y Beijing, ya que esta impactará en los volúmenes de soja molida por la industria local, y de allí que los analistas definan tres escenarios posibles:
Publicado: 10 de enero de 2019
Fuente: Bichos del Campo
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